Yo he dado biberón a mí hija

Yo he dado biberón a mí hija.

            Ayer leí un comentario en un blog, no recuerdo ahora mismo quien era ni lo que decía pero otra vez me entró la necesidad de escribir sobre el tema de la lactancia, del que llevo queriendo un tiempo hablar. Y antes de que nadie me eche a los leones por haber elegido esta opción, primero voy a contar mi postura y después mi experiencia.

            Que quede muy claro, soy de la opinión de  que la leche materna es la mejor opción, no soy una ilusa y no voy a negar una verdad tan grande solo porque yo no la haya seguido. Sé que el vínculo que se establece con el bebé es inmenso además del valor nutricional que aporta esta leche. Pero hoy en día es eso, una opción, la mejor, pero no la única. Y digo esto por una razón muy sencilla y es la experiencia que yo viví. Sobre todo no comparo, respeto, porque cada uno vive su maternidad como quiere y puede.

             Tengo una amiga que fue mamá poco después que yo, y una de las cosas que más me gustan de ella desde que es madre, es oírla hablar de lo bien que se siente dándole el pecho a su pequeña, de lo feliz que le hace y con solo escucharla y verla la cara ya me queda claro lo maravilloso que tiene que ser la lactancia materna.

            Desde que me quedé embarazada hace dos años yo tenía claro que quería dar el pecho a mi bebé, durante mi embarazo me informé mucho , leí consejos para amamantar , posturas, posibles remedios a las dificultades que podría encontrarme, La Liga de la Leche, la asociación de tal... en fin sobre lactancia materna hay información toda la que quieras. Pero llegó el momento, nació mi bebé y lo intenté, y mucho  y por diversas causas que creo que no es necesario que cuente en detalle, después de un par de semanas ví que era misión imposible. 

            Estoy segura de que el 90% de las personas que lean esto pensarán que no lo intenté lo suficiente, que no pedí consejo, que no me informé bien ... vamos lo que pone en las mil y una webs que me leí y médicos a los que pregunté. Pues no fue así, lo intenté y mucho, y cuando no lo conseguí no me desanimaba y me sacaba la leche, me la sacaba una y otra vez, para seguir estimulando el pecho y que aquello no parase y lo seguía intentando. Pero me creáis o no, ni conseguí que se enganchase ni generar la suficiente. Lo que se suponía que iba a ser la experiencia más maravillosa del mundo para mi se convirtió en un suplicio.

            Y un día decidí que hasta ahí, que lo estaba pasando mal y no tenía por qué. Cuando llegó ese momento me sentí horriblemente mal, una mala madre, sentí que no lo había intentado lo suficiente y lloré mucho. Y lo mismo que cuando quería dar el pecho encontré las mil y una web, cuando tomé esta decisión no encontré nada, ni una de apoyo de "no pasa nada lo has intentado y tienes otra opción que es igual de valida" , nada de eso. Eché de menos algún sitio de "ánimo, no eres una mala madre" , solo los encontraba de "no te rindas nunca y sigue intentándolo hasta que mueras de dolor porque al final de los dias lo conseguirás". Y lo digo así porque de verdad en el momento me sentí así, porque me hacían sentirme así, me hacían sentirme una mala persona.

            Al final recurrí a la que nunca me falla, mi madre, la que siempre me apoya y me hizo darme cuenta de que no hacía nada malo, que parase ya y empezase a disfrutar. También conté con el apoyo de una amiga que me contó la experiencia de su hermana, la misma que la mía, y el sentir que había más gente como yo me hizo sentirme mejor. Y oye los días posteriores no fueron más sencillos, porque pasé unos dolores y mareos con las pastillas que te dan para cortarlo horrorosos.

            Le he dado el biberón a mi hija, lo he hecho yo y lo ha hecho el padre, y con 16 meses que va a hacer ahora está fuerte y sana como un roble, y también hemos creado nuestro vínculo con ella en el momento de las comidas, aunque de una manera no tan íntima pero igual de cercana. Todo lo que tiene de bueno la leche materna, nosotros lo hemos intentado suplir de alguna manera, y no nos ha salido mal, la nena está para comérsela os lo puedo asegurar. Y el día que tenga otro nene, optaré por esta opción, porque es una opción valida, y que nadie me mire mal por mi decisión porque ya no me van a volver a hacer sentir mal.

            Ya lo he dicho antes, no soy "pro" nada ni "anti" nada, respeto a todo el mundo,  pero necesitaba contar esto para las que pasan por mi situación, bien por elección propia o por necesidad, que no se sientan mal, porque yo eché de menos leer alguna experiencia de este tipo cuando me encontraba mal. Y alguien necesita hablar sobre ello y comentar aquí me tienen, en  La Liga de las opciones.